jueves, 2 de mayo de 2013

The Special one

Se aconseja leer acompañado de Niños de Sidonie (MGMT cover) http://www.youtube.com/watch?v=fu-9_Xv0Wxc

A Claudio nunca le habían dicho que era especial. Nunca se había sentido especial. Desde que tenía uso de memoria su vida había pasado sin pena ni gloria, sin destacar en nada. En el colegio sacaba notas muy normalitas, aprobados sin más. Sin motivación necesaria Claudio apenas se esforzaba en estudiar y trataba de hacer lo mínimo para no ir retrasándose en cursos aunque a veces pensaba que si eso alguna vez pasaba podría ser el mayor de una clase y eso ya sería destacar en algo.

En casa tampoco llamaba especialmente la atención. Siendo el mediano de tres hermanos,por encima de él, el mayor era un gran deportista, un atleta que exhibía orgulloso en su habitación y en otros lugares comunes de la vivienda familiar sus trofeos y medallas.

Y por debajo su hermana había resultado ser una virtuosa instrumentista a la que continuamente le llovían ofertas de ingreso en las más célebres y respetadas bandas y orquestas del país e incluso del extranjero.

Claudio, a pesar de los numerosos esfuerzos de sus padres por encontrarle vocación o dedicación en la que demostrar habilidades se sentía inseguro y torpe. Como deportista no era un patán pero en cualquier deporte que practicaba se hacía patente que por mucho que entrenara no dejaría de ser uno más del montón. Claudio se daba cuenta y se aburría al poco tiempo.

Con los instrumentos de su hermana no le iba mejor. Carecía de talento, eso estaba claro. A menudo se encerraba en sus mundos de fantasía que él creaba y en los que él era un héroe, un príncipe o un valiente caballero al que todos adoraban y respetaban.

Una vida condenada al ostracismo, a la frustración....hasta que un día sin saber muy bien el porqué se le acercó una antigua amiga y le besó. Claudio extrañado, no se sentía atractivo, le preguntó con la mirada, sin aire para que de su boca saliera palabra alguna. Ella le dijo..."eres especial", y para que no hubiera ninguna duda lo volvió a besar.

De vuelta a casa con una sonrisa de oreja a oreja Claudio compró flores, 6 preciosas rosas, ayudó a su madre con la cena y escribió su primer poema. Claudio era especial para alguien. Claudio, por primera vez, se sentía especial.

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